¿Sabías que en promedio el 70% de las emergencias veterinarias que ocurren con gatos están asociadas a inconvenientes renales y a problemas en el tracto urinario inferior? Así es. Si te preguntas por qué tu gato no puede orinar y qué cosas debes hacer para remediarlo, estás en el lugar indicado.
La alimentación y el estrés suelen ser las principales causas por las cuales un gato podría tener problemas para orinar. Esta condición suele agravarse en los machos castrados, llegando a presentar casos más complejos que deben ser tratados a tiempo.
Hay que estar muy atentos a los trastornos urinarios de nuestros felinos, especialmente porque en algunos casos los síntomas son casi imperceptibles. A continuación conocerás a fondo cada una de las causas por las que un gato no puede orinar y cómo prevenirlas.
Este es uno de los comportamientos más comunes cuando estamos en presencia de una posible cistitis o infección en el tracto urinario inferior. Los problemas en la micción de algunos gatos puede ir de una condición más aguda a una situación definitivamente más crónica, que deberá ser atendida de inmediato por tu veterinario.
Si tu gato:
Estás en presencia de un problema urinario y necesitas de la asistencia de un profesional. Todos estos síntomas podrían estar asociados a un cuadro de cistitis, infección o la obstrucción parcial o total de la uretra debido a la presencia de cálculos en la orina.
Los trastornos urinarios deben atenderse cuanto antes, pues afectan la salud renal de tu mascota, provocándole inapetencia, pérdida de peso, decaimiento y en un lapso de tiempo no muy prolongado, la muerte.
Hablemos de las causas generales, así como las circunstancias más comunes, por las que tu gato podría tener un problema de micción.
Debes asegurarte de brindarle a tu gato un suplemento de calidad. Las líneas de alimento de mantención, suelen tener ingredientes que además de ocasionar obesidad, favorecen la formación de cálculos y con esto, los problemas urinarios.
Ocupa una línea de alimento premium o súper premium que no solo cuide su salud renal, también estimule en tu mascota el consumo de agua. ¡Un felino que bebe agua limpia y fresca en abundancia, tiene menos probabilidades de presentar problemas de micción!
Esta es otra de las causas más usuales por las que tu gato no puede orinar. Dependiendo de la dimensión de los cálculos y de la gravedad del problema la obstrucción podría ser parcial, dificultando la micción y ocasionando ardor o dolor, o total.
Una condición estresante o que mantenga a tu gato ansioso o nervioso, afectará indiscutiblemente sus hábitos, no solo al ocupar el arenero, también al comer o descansar.
Si tu felino ha sido sometido recientemente a un cambio brusco, como una mudanza, la llegada de una nueva mascota a casa o la presencia de algún desconocido, sus problemas de conducta podrían ser consecuencia de esta anormalidad.
(Lee: ¿Cómo corregir a un gato que muerde?)
Además de las ya mencionadas, tu gato podría tener problemas al orinar a causa de una infección bacteriana (lo cual suele ser muy común en gatos diabéticos o que ya presentan una condición renal previa), posibles anomalías o malformaciones en el tracto urinario y la cistitis idiopática, caracterizada entre otras cosas por la presencia de sangre en la orina.
Hay que estar alerta a cualquiera de estas condiciones, porque de no ser atendidas a tiempo podrían resultar letales.
La medicina preventiva es la mejor opción cuando se trata de cuidar la salud renal de tu gato. Anticípate a los problemas urinarios seleccionando para él la dieta adecuada desde que es un gatito.
Si tu mascota presenta una condición renal, no dudes en proporcionarle un alimento como Hill’s con su efectiva fórmula para el cuidado del tracto urinario inferior.
Gracias a su fórmula desarrollada con citrato de potasio, previene la formación de cristales de oxalato de calcio y disuelve los urolitos de estruvita.
Está desarrollado con una fórmula baja en magnesio, calcio y fósforo, además de estar enriquecido con Omega 3, sustancia que ayuda a prevenir y mejorar la posible inflamación del tracto urinario.
Su pH balanceado cuida la salud renal de tu felino, convirtiéndose en una excelente opción como dieta de mantención en gatos castrados adultos.
Este alimento es ideal como dieta de mantención en gatos adultos que presentan enfermedad renal. Su fórmula cuenta con una tecnología que promueve el apetito y que garantiza niveles de fósforo y sodio reducidos, para evitar la sobrecarga del riñón.
Los aminoácidos esenciales de este alimento garantizan el fortalecimiento del sistema muscular de tu gato, aún y cuando la enfermedad renal ocasiona pérdida de tejido muscular. Cuenta a su vez con L-carnitina para proveer a tu mascota de energías, así como ácidos grasos saludables que previenen la inflamación renal.
Gracias a su proteína de notable calidad y a su receta balanceada, no solo fortalecerá el sistema inmune de tu gato, también cuidará de su salud renal, cardiovascular y hepática.
Es normal que los gatos se muestren un poco reacios a la idea de hidratarse con la frecuencia necesaria. Algunos son bastante quisquillosos con la pureza del agua, su frescura, así como el recipiente del cual la beben.
Algunas dietas para gatos están formuladas para obligar a la mascota a beber con frecuencia. Tú también puedes ayudar a que tomar agua sea un placer para tu felino, ofreciéndole siempre agua limpia, fresca y preferiblemente potable.
Mantener en óptimas condiciones la bandeja sanitaria de tu gato lo ayudará a acudir a ella con frecuencia, sin que eso le ocasione incomodidad o estrés.
Lo creas o no, el lugar de la casa donde colocas el arenero, la higiene constante del sustrato o arena, así como la posibilidad de que tu gato acuda a él sin sentirse amenazado u observado, son factores determinantes para la salud y el comportamiento de tu mascota.
Ofrecer a tu gato pequeñas porciones de alimento durante el día es una manera muy efectiva de cuidar su salud renal. No basta con escoger un buen suplemento para el cuidado del tracto urinario; comer en pequeñas porciones ayuda a que el pH de la orina se mantenga estable y balanceado.
Estar solo por mucho tiempo, la llegada de una nueva mascota al hogar, los cambios bruscos en el ambiente… Todos estos factores alteran la tranquilidad de tu gato y, lo creas o no, las situaciones de ansiedad o estrés pueden llevar a tu mascota a vivir un episodio de cistitis idiopática.
Vigila cada detalle de la alimentación y el cuidado de tu mascota con atenciones y afecto. De esta manera puedes estar seguro de que mantendrás controlada su salud renal y cualquier inconveniente que pueda afectarla.
(Lee: ¿Cómo identificar y tratar la cistitis de origen desconocido en gatos?)
Referencias bibliográfica:
Almudena Alameda (2019). ¡Evita que tu gato sufra problemas urinarios! La Vanguardia. Recuperado de: https://www.lavanguardia.com/vivo/mascotas/20190514/462146247742/evita-gato-sufra-problemas-urinarios-flutd.html
María Besteiros (2020). Mi gato orina muchas veces poca cantidad – Causas. Experto Animal. Recuperado de: https://www.expertoanimal.com/mi-gato-orina-muchas-veces-poca-cantidad-causas-25170.html
Zorayda Coello (2019). Remedios caseros para un gato que orina sangre. Experto Animal. Recuperado de: https://www.expertoanimal.com/remedios-caseros-para-un-gato-que-orina-sangre-24123.html
Compartir
Whatsapp
