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¿Cómo evitar los problemas de alimentación en gatos?

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Si crees que la alimentación en gatos es un aspecto importante para garantizar su buena salud, estás en lo correcto. Muchos problemas gastrointestinales o enfermedades están asociadas, casualmente, a la elección equivocada cuando se trata de un suplemento.

 

Hoy hablaremos acerca de los problemas de alimentación en gatos más comunes, sus consecuencias y de qué forma puedes prevenirlos. Sigue leyendo.

¿Cuánto deben comer los gatos?

La cantidad de comida que deben comer los gatos depende de su tamaño, edad, nivel de actividad y estado de salud. En promedio, un gato adulto necesita alrededor de 2-3 tazas de comida al día, divididas en dos comidas.

 

Es importante seguir las recomendaciones del fabricante en la etiqueta de la comida para gatos y hablar con un veterinario para determinar las necesidades alimentarias específicas de tu gato. En especial si tu mascota está sometida a una dieta especial.

¿En qué consiste una dieta equilibrada para un gato?

Una dieta equilibrada para un gato debe incluir ingredientes esenciales que garanticen que tu mascota está recibiendo del suplemento todos los nutrientes que necesita para su correcta alimentación y desarrollo.

 

Los alimentos húmedos pueden proporcionar la hidratación necesaria que a menudo falta en la comida seca. Es importante hablar con un veterinario para determinar la mejor dieta para su gato y evitar problemas de salud a largo plazo. Sea como sea, estos son los ingredientes a los que debes prestar especial atención tratándose de alimentación en gatos:

 

Proteínas de origen animal de alta calidad: La carne o el pescado son una buena fuente de proteínas para los gatos, además de indispensable. Recuerda que tu mascota es carnívora y su dieta dependerá en mayor porcentaje de la proteína animal que consuma.

 

Grasas esenciales: Las grasas son importantes para mantener la piel y el pelaje saludables y para proporcionar energía. Los ácidos grasos Omega-3 y Omega-6 son de mucho provecho para los gatos.

 

Vitaminas y minerales: como cualquiera de nosotros, los gatos también necesitan una variedad de vitaminas y minerales, incluyendo vitamina A, tiamina, niacina y ácido fólico.

 

Baja en carbohidratos: Los gatos son carnívoros y no necesitan grandes cantidades de carbohidratos o fibra en su dieta. Esto solo se puede convertir en un problema a largo plazo, acarreando obesidad.

 

Sin subproductos de origen vegetal: Los subproductos de origen vegetal, como los granos, no son necesarios para los gatos y pueden convertirse en un problema de salud.

 

Es importante elegir alimentos de calidad y evitar los alimentos con conservantes artificiales, colorantes y sabores artificiales. También es recomendable hablar con un veterinario para determinar la cantidad exacta de comida que su gato necesita. Así evitarás problemas de sobrepeso o nutrición insuficiente.

¿Cuáles son los problemas de alimentación en gatos más comunes?

Ya sea por exceso o carencia, una alimentación en gatos inadecuada puede traer problemas. Del mismo modo, no seleccionar adecuadamente el suplemento ideal puede derivar en alergias alimentarias o serios trastornos renales. A continuación te explicaremos los inconvenientes más comunes asociados con la nutrición de tu mascota.

Obesidad en los gatos

La obesidad en los gatos es un problema cada vez más común. Se produce cuando un gato consume más calorías de las que su cuerpo puede quemar, lo que resulta en un aumento de peso y grasa acumulada en el cuerpo.

 

La obesidad puede ser perjudicial para la salud de los gatos, ya que puede aumentar el riesgo de enfermedades crónicas como la diabetes, problemas renales, la enfermedad hepática o enfermedades del corazón.

 

La dieta y el estilo de vida son los dos factores principales que contribuyen a la obesidad en los gatos. Muchos gatos reciben una dieta poco saludable y un exceso de alimentos, lo que conduce a un aumento de peso. Además, muchas mascotas no reciben suficiente ejercicio y actividad física, lo que también contribuye al aumento de peso.

 

Para prevenir la obesidad en los gatos, es importante proporcionar una dieta equilibrada y controlada. La cantidad de alimentos que se da a un gato debe ser adecuada a su tamaño, edad, nivel de actividad y estado de salud. También es importante proporcionar ejercicio y actividad adecuados para mantener a tu mascota activa y saludable.

 

En caso de obesidad, es importante hablar con un veterinario para obtener un plan de pérdida de peso adecuado. Esto puede incluir una dieta controlada en calorías, un aumento en el ejercicio y la actividad física y la monitorización regular de la salud de tu gato.

 

La pérdida de peso gradual y controlada es importante para proteger la salud del animal y evitar enfermedades crónicas en el futuro.

Problemas renales causados por la alimentación en gatos

Pueden ser causados por una variedad de factores, incluyendo la edad, la enfermedad renal crónica y la nutrición inadecuada. Suministrar a tu gato alimentos indebidos, incluso comida humana, puede ser la causa de un posible trastorno renal.

 

Además, la nutrición puede ser especialmente importante para los gatos que tienen problemas renales, ya que una dieta inadecuada puede agravar sus problemas de salud.

 

Una dieta rica en proteínas y baja en fósforo es esencial para los gatos con problemas renales. Los gatos con insuficiencia renal crónica necesitan menos proteínas en su dieta para ayudar a reducir el trabajo de los riñones y prevenir el daño adicional. Además, es importante elegir alimentos de alta calidad que contengan buenas proteínas y evite los subproductos y otros ingredientes de relleno.

 

Además de una dieta adecuada, es importante proporcionar a los gatos con problemas renales la cantidad indicada de agua. Las mascotas con insuficiencia renal crónica a menudo tienen sed constante y pueden necesitar más agua para mantener su hidratación.

Intolerancias alimentarias más comunes en gatos

Pueden ser causadas por una variedad de factores, incluyendo alergias alimentarias, intolerancias a los carbohidratos y desórdenes digestivos. Aquí describiremos las intolerancias alimentarias más comunes en los gatos:

 

Alergias alimentarias: son una de las intolerancias alimentarias más comunes en los gatos. Estas alergias pueden ser causadas por proteínas en la comida, como la carne de pollo o pescado y pueden causar síntomas como comezón, erupciones cutáneas y diarrea.

 

Intolerancias a los carbohidratos: algunos gatos pueden ser intolerantes a los carbohidratos. Esto puede causar síntomas como diarrea, gases y dolor abdominal.

 

Desórdenes digestivos: pueden desarrollar desórdenes digestivos, como el síndrome del intestino irritable, que puede causar síntomas como diarrea, estreñimiento y dolor abdominal.

 

Es importante hablar con un veterinario si se sospecha que un gato tiene una intolerancia alimentaria. El veterinario puede realizar pruebas para determinar la causa exacta y recomendar una dieta adecuada para el gato.

¿Cómo prevenir trastornos alimenticios en mi gato?

Prevenir los trastornos alimenticios en tu gato es muy fácil si su dieta está debidamente controlada. Aquí hay unos sencillos consejos:

 

Alimentación controlada: Ofrecer comida en pequeñas porciones y a horas regulares puede ayudar a prevenir el exceso de alimentación y el sobrepeso.

 

Dieta equilibrada: Proporcionar una dieta balanceada y apropiada para la edad, tamaño y nivel de actividad del gato puede ayudar a mantener un peso saludable y prevenir problemas de salud relacionados con la alimentación.

 

Evita los alimentos procesados: Los alimentos procesados a menudo contienen ingredientes artificiales y conservantes que pueden ser perjudiciales para la salud del gato. Es mejor optar por alimentos de calidad y sin conservantes.

 

No compartir comida humana: No se recomienda dar a los gatos comida para humanos, ya que muchos de estos alimentos pueden ser tóxicos para ellos.

 

Ofrecer agua fresca: Asegurarse de que el gato tenga acceso constante al agua fresca puede ayudar a mantener una hidratación adecuada y prevenir problemas renales relacionados con la alimentación.

 

Evite el alimento húmedo: El alimento húmedo a menudo contiene preservantes y conservantes que pueden ser perjudiciales para la salud de algunos gatos. Consulta antes con tu veterinario.

 

Monitorear el peso: Es importante monitorear el peso del gato regularmente y hablar con un veterinario si se nota un aumento de peso repentino o un cambio en el apetito.

 

Ahora ya sabes los problemas que puede causar una alimentación deficiente en gatos. Con estos consejos podrás evitar los contratiempos y mantener a tu mejor amigo feliz.

 

Referencias:

Mascotas (2020). Cómo alimentar correctamente a un gato. Muy interesante. Recuperado de: https://www.muyinteresante.es/mascotas/6014.html

 

Magazine (S/F). Alergia alimentaria en gatos. Zooplus. Recuperado de: https://www.zooplus.es/magazine/gatos/alimentacion-del-gato/alergia-alimentaria-en-gatos

 

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